Leucina

La Leucina es uno de los 9 aminoácidos esenciales de los 20 que tienen nuestras células, el cual nuestro cuerpo no lo puede producir, por ende se debe consumir a través de los alimentos o suplementos.

Constituye cerca del ocho por ciento del total de los aminoácidos presentes en las proteínas del cuerpo. Siendo el cuarto aminoácido con mayor concentrado en el tejido corporal.

Es un aminoácido apolar ramificado, es decir sin carga y de cadena larga. Tiene un pH neutro y su abreviatura es Leu.
Se maneja en el hígado, tejido muscular y tejido adiposo; en estos dos últimos se aplica para la creación de esteroles los cuales cumplen funciones estructurales, reguladoras y hormonales.

Éste aminoácido forma parte del código genético. Tiene la facultad de simular a la insulina y auxiliar al azúcar a ingresar en las células. También puede suplir a la glucosa durante espacios de ayuno, siendo esta una cualidad que no es compartida por los otros aminoácidos.

La Leucina se forma por la aglomeración del ácido a-cetoisovalérico que junto a la acetil CoA, origina una sucesión de compuestos, hasta que posteriormente surge la Leucina.

Experimenta una alteración durante el envejecimiento, lo que ocasiona un desequilibrio en la fabricación de las proteínas musculares; motivo por el cual se produce una pérdida de la masa muscular en los ancianos.

Función

Es muy valioso en circunstancias donde se demande niveles altos de cicatrización, ya sea por fracturas, heridas, distenciones, luxaciones, etc.
Está probado que en los casos de operaciones, los aportes de éste aminoácido esencial, ayudan a lograr una recuperación del paciente más rápida.

La Leucina interviene en el metabolismo de los carbohidratos, facilitando la absorción de la glucosa por las células, regulando así los niveles de azúcar en la sangre, resultando apropiado para la diabetes.

Es imprescindible en el desarrollo muscular, evitando la distrofia muscular o la falta de musculatura. También ayuda a conservar la salud de la vesícula biliar y del hígado, así mismo aumenta la fabricación de la bilis, impidiendo la indigestión o la insuficiencia hepática.

Evita el enanismo al activar la hormona del crecimiento. La Leucina es importante para una buena salud mental, ayudando a evitar los trastornos mentales y otros inconvenientes de comportamiento. Su uso es adecuado en casos de ansiedad, estrés, depresión y nerviosismo.
Indirectamente cumple una función reguladora en la adecuada segregación biliar, así como en funciones hormonales sexuales, tanto femeninas como masculinas.

Dosis diaria recomendada

La FAO recomienda consumir normalmente 39 mg/día de Leucina por kilogramo de peso y 45 mg/día por kilogramo de peso para personas sedentarias.
Estas cantidades se incrementan en personas deportistas y se sugiere una ingesta equivalente a 8 gramos o más diario, incluso las recomendaciones llegan a 20 gramos por día en entrenamientos que requieren excesiva sobrecarga.

Alimentos que lo contienen

Porciones de una onza (28,7 gramos) de alimentos que más contienen Leucina, son:

  • Proteína aislada de soya, 1.9 gramos (g) de leucina (Leu)
  • Carne vacuna y de cerdo, 0.7 g de Leu
  • Queso cheddar, 0.7 g de Leu
  • Atún, 0.5 g de Leu
  • Pollo y pavo, 0.4 g de Leu.
  • Requesón y huevos, 0.4 g de Leu
  • Yogurt, 0.2 g de Leu
  • Lentejas, frijoles negros y frijoles pintos, 0.2 g de Leu

Déficit de Leucina

Su carencia puede causar una variedad de trastornos en el organismo, algunos de ellos son: deficiente en la cicatrización de traumatismos y heridas, mayor tendencia a sufrir lesiones en el hígado, variaciones de la glucosa, alteraciones en la masa muscular, deficiencia en el crecimiento, alteraciones de conducta y trastornos mentales.

Exceso de Leucina

Las altas cantidades de ingesta de suplementos de Leucina pueden producir la acumulación de amoníaco en el cuerpo. Demasiado amoníaco circulando en la sangre puede originar daños en los tejidos de los órganos. Los riñones y el hígado son principalmente susceptibles a la toxicidad del amoníaco, porque estos auxilian al cuerpo al filtrar el exceso de amoníaco en la circulación sanguínea.

Los niveles altos de Leucina puedan causar disminución de la vitamina B3 o niacina en el organismo.
Puede producir hipoglucemia o bajos niveles de azúcar en la sangre de algunas personas, debido a su potencial de provocar la producción de la insulina por el páncreas.

Logra ocasionar efectos tales como nauseas, vómitos, malestar estomacal y diarreas.